Lucio Bordenave lleva una apacible existencia de casado en un pequeño barrio porteño apartado de todo, con calles circulares. Repentinamente, la mujer de Lucio, Diana, es internada en un instituto de salud mental, destinado a curar a gente “especial”. Bordenave se ve envuelto de pronto en una desopilante serie de impredecibles peripecias, donde lo real se confunde con lo imaginado, el sueño con la vigilia y la locura con la lucidez.