Desconocemos la cantidad de agua que hay bajo el suelo en España. Ignoramos que este agua dulce subterránea puede ser crucial en los próximos años. La extracción ilegal, la sobreexplotación y la contaminación están poniendo en riesgo las reservas disponibles para el abastecimiento de la población y amenazando gravemente joyas naturales como los parques nacionales de Doñana y las Tablas de Daimiel o el Mar Menor.